lunes, 16 de abril de 2012

Remembering Lovely Death (Part 1)

Puesto sobre su cama con el alma abierta, recordando momentos en los que la felicidad tocaba con delicadeza, los besos que humedecían sus labios en las noches invernales, la mano a la que se aferraba para no caer al abismo. Asimismo su fuente de calor corporal ya no se encuentra, la soledad toma control en su apariencia y en sus emociones.
No es agradable vivir sin protección, antes creía que estaría mejor sin los golpes que me proporcionabas, que podría prescindir de las palabras que forjaban mi carácter y me ponían en pie sobre la realidad. La fuerza de tus manos ebrias que marcaba mi tez. No es agradable dejar de sentir.
Siento tus dedos rodear mi cintura fuertemente mientras te introduces en mi mundo sombrío. Los roces que me suministras, mas que dolorosos son placenteros. Sentir fluir tu vitalidad en mis agujeros negros es algo especial, mente que se alimenta de palabras y gemidos halagadores. Mi cara refleja todo lo que mis palabras no son capaces de describir; tus venas entrando en mi cuerpo. Somos uno en el ahora, nada más cabe entre nosotros.
Recuerda esos momentos en los que nos disponíamos a gritar hasta quedar roncos, arriesgados en nuestra juventud, la ignorancia nos hacía felices, sin nada de qué preocuparnos,  sólo tú y yo en amores superiores. Todo vértigo era encanto mientras apretaras mi mano.
Tu nombre por siempre estará marcado en mi cuerpo. Mi mundo jamás volverá a ser como lo era. Creo firmemente en los hechos y no en tu memoria. Cualquier tiempo pasado contigo es mejor que el presente sin ti. Recuerda cariño, vuelve a lo irracional y aférrate al amor. No te dejes olvidar lo que jamás va a repetirse, tú y yo merecemos la dicha eterna, juntos como desde el principio, tal como debe ser.
Sólo necesitas recordar tus sentimientos, como yo en esta noche. No te permitas alejarte de quien te hace feliz.
No estés triste, porque aunque no puedas recordar sé que tu inconsciente deseo es que permanezcamos juntos hasta la muerte, así como me prometías.
Aunque mis brazos estén cansados de aguantar tus palizas y morados de tanto golpe, mi voluntad es mayor que mi cuerpo, yo haré todos tus deseos posibles. Esta noche recordarás en tu último aliento la dicha de ser amado.
Ahí estás, tendido en el suelo, tu aliento tan repugnante y seductor.
- No necesitas hablar, sólo mírame y siente mi cuerpo mientras te ato las manos. ¡Shh! no necesitas saber lo que hago, sólo compláceme como siempre. ¡Sí! Déjame desnudarte para curar tus heridas, yo también prescindiré de ropa alguna, no es necesaria en la intimidad. ¡Qué ricos labios, amor! Extrañaba tu carne en mis manos, mis dedos enredados entorno a tu falo firme. Ahora cierra tus ojos, trata de relajarte y comienza a recordar. Déjame a mí ocuparme de todo, sí, esta vez seré quien esté arriba, tu sólo mantente amándome mientras me balanceo sobre ti. Así es, deja fluir tu deseo dentro de mí, que tu pene sea el que haga contacto con mi interior.
-¡Hijo de puta sigue así! ¡Ahhhhh! ¡Siiiii! Jódeme maldito. ¡Maldito! ¡Qué rico! ¡No termines nunca! - <<Así es, al final moriremos juntos con el cuchillo que he traído en mi pantalón>>.


…Hurtblood…

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Buena esa